HyPrSpace se prepara para lanzar su cohete demostrador Baguette One desde Francia

La industria aeroespacial europea da un paso más hacia la diversificación y la innovación con el próximo lanzamiento del demostrador Baguette One, desarrollado por la joven empresa francesa HyPrSpace. Esta startup, fundada en 2019, ha firmado recientemente un acuerdo clave con la Direction générale de l’armement (DGA), el organismo de adquisiciones de defensa de Francia, que permitirá el uso de una reconocida zona de pruebas de misiles en la Francia continental para realizar el esperado primer vuelo de su cohete demostrador. Este hito marca un avance estratégico no solo para la compañía, sino también para el sector espacial francés y europeo, que busca ganar terreno frente a los gigantes internacionales como SpaceX, Blue Origin o la propia NASA.
El motor híbrido: innovación tecnológica en propulsión
HyPrSpace centra sus esfuerzos en el desarrollo de un motor cohete híbrido, una tecnología que combina las ventajas de los motores sólidos y líquidos. El motor híbrido utiliza un combustible sólido y un oxidante líquido, fusionando así la simplicidad y seguridad de los motores sólidos con la capacidad de control y eficiencia de los motores líquidos. Esta elección tecnológica pretende ofrecer una opción más segura, versátil y económica para lanzamientos comerciales de satélites pequeños, un segmento que está experimentando una auténtica explosión de demanda a nivel global.
El demostrador Baguette One servirá como banco de pruebas para validar en condiciones reales el funcionamiento de este motor híbrido, antes de aplicarlo a su vehículo orbital, el Orbital Baguette 1 (OB-1). El OB-1 está concebido para transportar pequeñas cargas útiles a órbita terrestre baja (LEO), posicionando a HyPrSpace en el competitivo mercado de lanzadores ligeros, donde empresas como la española PLD Space con su cohete Miura 1 y Miura 5, y la británica Skyrora, también buscan consolidar sus propuestas.
Un contexto de competencia y colaboración internacional
El acuerdo con la DGA es especialmente relevante en un contexto en el que Europa aspira a reforzar su soberanía en el acceso al espacio. Tradicionalmente, grandes lanzadores como el Ariane 5, el Vega o el Soyuz han sido la columna vertebral de los lanzamientos europeos, pero la irrupción de empresas privadas como SpaceX y su reutilización de cohetes con la familia Falcon, o el New Shepard suborbital de Blue Origin, ha cambiado las reglas del juego. Estas compañías han demostrado que la innovación y la reducción de costes abren nuevas oportunidades de negocio y acceso al espacio.
Mientras tanto, la NASA y la ESA colaboran en misiones científicas y de exploración, como el reciente lanzamiento del telescopio James Webb o las misiones de búsqueda de exoplanetas como TESS y CHEOPS. Sin embargo, la proliferación de empresas privadas, tanto en Estados Unidos como en Europa, está acelerando la evolución tecnológica y la aparición de nuevos servicios de lanzamiento, incluyendo propuestas de turismo espacial como las de Virgin Galactic.
El papel de Francia y Europa en la nueva carrera espacial
Para Francia, el apoyo a startups como HyPrSpace refleja la importancia estratégica de mantener y desarrollar capacidades nacionales de lanzamiento. La posibilidad de realizar pruebas y lanzamientos desde suelo continental francés, y no solo desde la Guayana Francesa, representa una oportunidad para diversificar infraestructuras y fomentar la autonomía tecnológica. Además, permite responder con más agilidad a las necesidades de un mercado global que demanda lanzamientos más frecuentes, flexibles y económicos.
El demostrador Baguette One será sometido a una batería de ensayos y pruebas antes de su lanzamiento inaugural, previsto para los próximos meses. Estos ensayos permitirán a los ingenieros comprobar la fiabilidad del motor híbrido y validar los sistemas de guiado, navegación y control, pasos imprescindibles para avanzar hacia la certificación de su lanzador orbital OB-1.
Perspectivas y futuro: hacia una nueva generación de lanzadores europeos
El éxito de esta misión podría significar la consolidación de HyPrSpace como uno de los referentes europeos en el emergente mercado de lanzadores ligeros. Empresas como PLD Space, con su reciente éxito en el lanzamiento del Miura 1 desde Huelva, ya han demostrado que Europa cuenta con talento y capacidad para competir globalmente. La diversificación de tecnologías y la aparición de nuevos actores contribuirán a fortalecer la posición europea frente a SpaceX, Blue Origin y las futuras iniciativas de gigantes como China o India en la exploración y explotación comercial del espacio.
En definitiva, el lanzamiento del demostrador Baguette One no solo representa un paso adelante para HyPrSpace, sino que simboliza el esfuerzo colectivo de Europa por asegurar un acceso independiente, seguro y competitivo al espacio, abriendo nuevas oportunidades para la ciencia, la industria y la exploración más allá de nuestro planeta.
(Fuente: European Spaceflight)

 
							 
							