NASA adjudica un contrato de 163 millones de dólares para avanzar en la investigación atmosférica

La Agencia Espacial de Estados Unidos (NASA) ha dado un paso decisivo en su compromiso con el estudio de la atmósfera terrestre al seleccionar a la empresa Science and Technology Corp. (STC), con sede en Columbia, Maryland, como responsable de la prestación de servicios de apoyo científico y tecnológico en el Centro de Vuelo Espacial Goddard, ubicado en Greenbelt, Maryland. Este acuerdo, con un valor máximo de 163,1 millones de dólares, se formaliza bajo la modalidad de contrato de coste más honorarios fijos y contempla entregas y pedidos indefinidos a lo largo del periodo de vigencia.
El contrato entrará en vigor a partir del lunes 3 de noviembre, y su objetivo principal será potenciar la investigación y el desarrollo en ciencias atmosféricas, un campo que ha cobrado especial relevancia en la última década debido al creciente interés internacional por comprender y mitigar los efectos del cambio climático, así como mejorar los modelos de predicción meteorológica y climática.
El Centro Goddard, epicentro de la investigación atmosférica
El Goddard Space Flight Center es uno de los principales centros de la NASA dedicados a la observación de la Tierra y el estudio de su atmósfera. Desde su fundación en 1959, ha desempeñado un papel crucial en el desarrollo de satélites, instrumentos de teledetección y misiones pioneras que han permitido observar la atmósfera terrestre desde el espacio con una precisión sin precedentes.
Entre los hitos históricos del Goddard destacan misiones como la del satélite Terra, lanzado en 1999, que revolucionó la monitorización global de la atmósfera, los océanos y la superficie terrestre. Asimismo, este centro ha liderado el desarrollo de instrumentos como el Ozone Monitoring Instrument (OMI) para el seguimiento de la capa de ozono y la contaminación atmosférica, o el Global Precipitation Measurement (GPM), fundamental para comprender los ciclos hidrológicos a escala planetaria.
Aportación técnica y alcance del nuevo contrato
El acuerdo firmado con Science and Technology Corp. permitirá a la NASA reforzar sus capacidades en áreas clave de investigación atmosférica. STC aportará equipos multidisciplinares de científicos, ingenieros y técnicos especializados en modelización atmosférica, calibración y validación de instrumentos, análisis de datos y desarrollo de nuevas tecnologías de observación.
Uno de los aspectos más relevantes de este contrato es el carácter flexible e indefinido de los pedidos, lo que permitirá adaptar los recursos a las necesidades cambiantes de los programas de investigación. Así, la NASA podrá responder con agilidad a nuevos retos científicos, como la monitorización de gases de efecto invernadero, el estudio de aerosoles y partículas en suspensión, o la mejora de los sistemas de alerta temprana ante fenómenos meteorológicos extremos.
El acuerdo también contempla el desarrollo de herramientas de software avanzado para el procesamiento y análisis de datos atmosféricos, así como la colaboración en campañas de observación tanto desde satélites como a través de plataformas aéreas y terrestres.
Colaboración y futuro de la investigación atmosférica
Con este contrato, la NASA refuerza su apuesta por la colaboración público-privada, una estrategia que se ha demostrado fundamental en el avance de la investigación espacial y científica. Empresas como SpaceX y Blue Origin han transformado el sector del lanzamiento espacial, mientras que actores europeos como PLD Space o Virgin Galactic están impulsando nuevas formas de acceso al espacio y experimentación en microgravedad.
En el ámbito de la investigación atmosférica, la colaboración con entidades privadas permite acelerar el desarrollo de tecnologías y metodologías innovadoras, así como optimizar la gestión de grandes volúmenes de datos generados por los satélites de observación. Además, la cooperación internacional con agencias como la ESA, JAXA o el CNES amplía el alcance y la eficacia de las campañas de monitorización global.
Importancia estratégica ante los retos climáticos
La adjudicación de este contrato se produce en un momento crítico para la ciencia atmosférica. El aumento de la concentración de gases de efecto invernadero, la intensificación de fenómenos meteorológicos extremos y la necesidad de prever el impacto del cambio climático sitúan a la investigación atmosférica en el centro de las prioridades científicas globales.
El trabajo que desarrollarán la NASA y Science and Technology Corp. permitirá mejorar la comprensión de los procesos atmosféricos, perfeccionar los modelos predictivos y proporcionar datos esenciales para la toma de decisiones en materia de política ambiental, gestión de recursos y seguridad civil.
En definitiva, este acuerdo refuerza la posición de la NASA como referente mundial en la investigación de la atmósfera terrestre y contribuye a sentar las bases para una mejor protección del planeta en las próximas décadas.
(Fuente: NASA)

 
							 
							