ATMOS Space Cargo y HyPrSpace se alían para probar nueva tecnología en el cohete Baguette One

El sector espacial europeo sigue ganando impulso con la reciente firma de un memorando de entendimiento entre la empresa alemana ATMOS Space Cargo y la compañía francesa de servicios de lanzamiento HyPrSpace. Ambas organizaciones han sellado este acuerdo con el objetivo de llevar a cabo una misión de demostración a bordo del innovador cohete Baguette One, cuyo lanzamiento está previsto para el año 2026.
ATMOS Space Cargo, especializada en logística aeroespacial, busca consolidarse como un referente en el transporte de cargas hacia y desde la órbita terrestre baja. Por su parte, HyPrSpace, fundada en 2019, ha apostado por el desarrollo de soluciones innovadoras en el ámbito de los lanzadores espaciales, centrándose especialmente en sistemas híbridos que prometen una mayor eficiencia y sostenibilidad en comparación con los cohetes tradicionales.
El proyecto Baguette One constituye la primera incursión de HyPrSpace en el ámbito de los lanzamientos suborbitales. Este vehículo será utilizado principalmente como plataforma tecnológica para validar nuevas soluciones de propulsión y sistemas de control, permitiendo a la empresa francesa adquirir valiosos datos antes de dar el salto a lanzadores orbitales de mayor envergadura. La colaboración con ATMOS Space Cargo permitirá, además, demostrar la capacidad de Baguette One para transportar cargas útiles, un paso esencial para atraer futuros clientes comerciales o institucionales.
La importancia de este acuerdo radica en la creciente competencia dentro del mercado espacial europeo, donde empresas privadas como la española PLD Space y la alemana Isar Aerospace están desarrollando sus propios vehículos lanzadores. PLD Space, por ejemplo, logró el año pasado el primer vuelo exitoso de su cohete Miura 1, marcando un hito para la industria espacial en España y abriendo la puerta al desarrollo del Miura 5, un lanzador orbital de nueva generación.
En este contexto, la apuesta por sistemas híbridos como el de Baguette One resulta especialmente relevante. Los motores híbridos, que combinan un combustible sólido con un oxidante líquido o gaseoso, ofrecen ventajas significativas en cuanto a seguridad y coste, así como una menor huella medioambiental. Este tipo de tecnología ha sido objeto de investigación tanto por parte de agencias públicas como privadas, incluyendo a la NASA y empresas como Virgin Galactic, que utiliza motores híbridos en su nave suborbital SpaceShipTwo para el turismo espacial.
El calendario de lanzamiento para la misión de demostración de ATMOS a bordo de Baguette One está fijado para 2026, y en ella se evaluarán tanto las capacidades técnicas del lanzador como la integración de cargas útiles experimentales. Este tipo de misiones, conocidas en el sector como “vuelos tecnológicos”, son fundamentales para validar componentes antes de su uso en entornos más exigentes, como la órbita terrestre baja o incluso misiones interplanetarias.
Cabe destacar que, a nivel global, el auge de las compañías privadas ha transformado radicalmente el panorama espacial en la última década. Gigantes estadounidenses como SpaceX y Blue Origin han revolucionado la industria con propuestas de reutilización de lanzadores y reducción de costes, motivando a empresas y agencias europeas a acelerar sus propios desarrollos. De hecho, la Agencia Espacial Europea (ESA) ha reforzado su apoyo a iniciativas privadas, consciente de la necesidad de mantener la competitividad frente a los avances estadounidenses y asiáticos.
Además, el sector espacial europeo ha experimentado un repunte en la inversión y el número de startups, impulsado por el auge de aplicaciones vinculadas a la observación de la Tierra, las telecomunicaciones y la exploración de exoplanetas. La NASA, por su parte, sigue liderando la investigación en la detección de planetas fuera de nuestro sistema solar, mientras que iniciativas privadas como las de Rocket Lab o Arianespace buscan ampliar su cuota de mercado mediante el desarrollo de lanzadores pequeños y medianos, adaptados a las nuevas demandas del sector.
La colaboración entre ATMOS Space Cargo y HyPrSpace no solo pone de manifiesto el dinamismo del ecosistema espacial europeo, sino que refuerza la tendencia hacia la cooperación internacional y la integración de tecnologías punteras. Si el lanzamiento de Baguette One resulta exitoso, podría abrir el camino a nuevos acuerdos comerciales y a la consolidación de la industria espacial en el viejo continente, en un momento en el que la exploración y explotación del espacio se ha convertido en un elemento estratégico de primer orden.
En definitiva, la misión conjunta de ATMOS Space Cargo e HyPrSpace representa un paso adelante en la consolidación de la capacidad europea para competir en el mercado global de lanzamientos, apostando por la innovación y la colaboración como motores del futuro espacial europeo.
(Fuente: European Spaceflight)
