POLARIS Spaceplanes integra misiles aire-aire en sus vehículos espaciales en colaboración con Diehl Defence

En un movimiento que subraya la convergencia entre la industria aeroespacial y la defensa, la joven empresa alemana POLARIS Spaceplanes ha anunciado una colaboración estratégica con la veterana contratista militar Diehl Defence. El objetivo de esta alianza es desarrollar el sistema Airborne Launching and Attack System (AirLAS), que permitirá equipar sus vehículos espaciales no tripulados con misiles aire-aire IRIS-T, uno de los proyectiles más avanzados de su clase.
POLARIS Spaceplanes, fundada en 2019, ha centrado sus esfuerzos en la creación de la nave AURORA, un avión espacial multipropósito diseñado tanto para el acceso rápido al espacio como para el transporte hipersónico. Con este nuevo proyecto, la compañía amplía su campo de acción, incorporando tecnología de defensa a sus plataformas aeroespaciales, lo que podría tener implicaciones significativas tanto en el ámbito civil como militar.
El sistema AirLAS: integración de capacidades espaciales y de defensa
El proyecto AirLAS tiene como eje principal la integración del misil IRIS-T en un vehículo aéreo no tripulado de POLARIS. El IRIS-T, desarrollado por un consorcio de empresas europeas liderado por Diehl Defence, es un misil aire-aire de corto alcance, ampliamente utilizado por fuerzas aéreas europeas y reconocido por su maniobrabilidad y precisión gracias a su sistema de guiado infrarrojo.
La incorporación de estos misiles a un avión espacial no tripulado representa un salto tecnológico notable. El concepto va más allá de la simple defensa o autodefensa de vehículos espaciales: abre la puerta a nuevas formas de operaciones en el espacio cercano a la Tierra, donde la capacidad de interceptar o neutralizar amenazas desde plataformas aéreas o suborbitales podría convertirse en un factor estratégico clave.
En 2024, la Oficina Federal de Equipamiento, Tecnología de la Información y Soporte en Servicio de la Bundeswehr (BAAINBw), el organismo responsable del equipamiento de las fuerzas armadas alemanas, ha mostrado su apoyo al proyecto, lo que sugiere un interés creciente por parte del gobierno alemán en el desarrollo de capacidades espaciales de doble uso.
AURORA: el avión espacial multipropósito alemán
La nave AURORA de POLARIS es el núcleo de la estrategia tecnológica de la empresa. Se trata de un vehículo espacial reutilizable, capaz de despegar y aterrizar horizontalmente, lo que ofrece ventajas logísticas y operativas sobre los cohetes convencionales de lanzamiento vertical. AURORA está concebido para operar tanto en misiones espaciales, como el lanzamiento de pequeños satélites, como en transporte hipersónico punto a punto, un campo que empresas como SpaceX y Virgin Galactic también exploran, aunque con tecnologías y conceptos diferentes.
La arquitectura de AURORA se apoya en motores híbridos y en materiales avanzados que resisten las altas temperaturas del vuelo hipersónico. La integración del sistema AirLAS no solo añade una capacidad ofensiva o defensiva, sino que también exige una adaptación de los sistemas de control y navegación del vehículo, así como de sus estructuras para soportar el lanzamiento de misiles en vuelo.
Tendencia global: militarización del espacio cercano
El anuncio de POLARIS y Diehl Defence se produce en un contexto internacional en el que varias potencias y empresas privadas están desarrollando tecnologías que combinan el acceso al espacio con aplicaciones militares. Estados Unidos, a través de compañías como SpaceX y Blue Origin, ha colaborado con el Pentágono y la Fuerza Espacial estadounidense en proyectos de transporte rápido de carga y defensa antimisiles en órbita baja. China y Rusia también avanzan en capacidades antisatélite y en plataformas espaciales con aplicaciones duales.
En Europa, la industria espacial tradicionalmente se ha enfocado en aplicaciones civiles y científicas, como la exploración de exoplanetas —donde la Agencia Espacial Europea (ESA) ha destacado en los últimos años— o el lanzamiento de satélites comerciales con cohetes como el Ariane 6. Sin embargo, iniciativas como la de POLARIS señalan un cambio de tendencia, en el que la frontera entre lo civil y lo militar se diluye ante los retos de seguridad en el entorno espacial.
El futuro de los aviones espaciales armados
La colaboración entre POLARIS Spaceplanes y Diehl Defence podría situar a Alemania a la vanguardia europea en cuanto a plataformas espaciales con capacidad de defensa activa. Si el sistema AirLAS demuestra su viabilidad, no solo se potenciaría la defensa nacional, sino que también se abrirían oportunidades en el mercado internacional para la exportación de tecnologías de aviones espaciales armados.
La integración de misiles aire-aire en vehículos espaciales plantea cuestiones técnicas y éticas de gran calado, desde la gestión del tráfico espacial hasta la posible escalada armamentística en el espacio cercano. Sin embargo, el avance de la tecnología y la colaboración público-privada parecen imparable, impulsando una nueva era en la que el espacio no solo será un escenario de exploración y comunicación, sino también de defensa activa.
El desarrollo del sistema AirLAS servirá como banco de pruebas para evaluar el potencial real de estas capacidades mixtas y su impacto en la seguridad y la industria espacial europea.
(Fuente: European Spaceflight)
