El rover Perseverance explora «Lac de Charmes» y abre una nueva era de descubrimientos en Marte
El rover Perseverance de la NASA, pieza central de la misión Mars 2020, continúa su imparable avance sobre la superficie marciana, adentrándose ahora en un territorio inexplorado situado más allá del borde occidental del cráter Jezero. Tras superar durante los últimos cuatro meses los escarpados desniveles de la estructura que rodea el cráter, el vehículo robótico ha comenzado a recorrer una vasta llanura bautizada como “Lac de Charmes”, en honor a un lago glaciar terrestre situado en los Alpes franceses.
Este nuevo capítulo en la odisea marciana del Perseverance marca un punto de inflexión tanto en el recorrido del rover como en la estrategia científica de la misión. Hasta la fecha, la exploración del cráter Jezero se ha centrado en el análisis de los sedimentos y depósitos del antiguo delta fluvial, una zona de gran interés para la búsqueda de signos de vida pasada, debido a la probable presencia de agua líquida en el pasado remoto del planeta rojo.
Sin embargo, la llegada a “Lac de Charmes” representa la primera incursión del Perseverance en los terrenos que rodean el cráter. Los científicos de la NASA esperan que el estudio de estos materiales exteriores, menos alterados por la actividad fluvial, ofrezca valiosas pistas sobre la historia geológica de Marte y la composición de las regiones adyacentes a Jezero. Además, el rover aprovechará esta etapa para probar la movilidad y resistencia de su sistema de locomoción en un entorno menos accidentado que el que caracteriza el interior del cráter.
La misión Mars 2020, lanzada el 30 de julio de 2020 a bordo de un cohete Atlas V desde Cabo Cañaveral, supuso un hito en la exploración robótica interplanetaria. Perseverance aterrizó con éxito en Marte el 18 de febrero de 2021, en uno de los descensos más precisos jamás realizados sobre la superficie de otro planeta. Desde entonces, el rover ha desplegado una impresionante batería de instrumentos científicos, entre los que destaca la SuperCam, capaz de analizar la composición química de las rocas a distancia mediante láser, y el SHERLOC, especializado en la detección de compuestos orgánicos y minerales relacionados con la presencia de agua.
Entre los logros más notables del Perseverance figura la recolección y almacenamiento de muestras, que en el futuro serán traídas a la Tierra gracias a una colaboración internacional entre la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA). Este ambicioso proyecto, conocido como Mars Sample Return, se perfila como uno de los grandes retos tecnológicos de la próxima década y podría responder a la eterna pregunta sobre la existencia de vida fuera de nuestro planeta.
El avance del Perseverance se produce en un momento de efervescencia para la exploración espacial, tanto pública como privada. A nivel internacional, China continúa operando con éxito su rover Zhurong en la llanura Utopia Planitia, mientras que la India y Emiratos Árabes Unidos han consolidado sus primeras misiones a Marte. Por su parte, la NASA mantiene una agenda repleta de hitos, con próximos lanzamientos destinados a estudiar la Luna, asteroides y exoplanetas.
El sector privado tampoco se queda atrás. SpaceX, liderada por Elon Musk, avanza en el desarrollo de su nave Starship, destinada a misiones tripuladas a Marte en el futuro, mientras que Blue Origin y Virgin Galactic compiten por dominar el turismo espacial suborbital. En Europa, la empresa española PLD Space ha logrado importantes progresos en el desarrollo de lanzadores reutilizables, con el objetivo de posicionarse como actor clave en el mercado de acceso al espacio.
El estudio de exoplanetas, es decir, planetas que orbitan otras estrellas, también vive una edad dorada. Telescopios espaciales como el James Webb de la NASA y el CHEOPS de la Agencia Espacial Europea están revolucionando nuestro conocimiento sobre la diversidad de mundos más allá del Sistema Solar, algunos de los cuales podrían reunir condiciones apropiadas para la vida.
El avance del Perseverance hacia “Lac de Charmes” representa no solo un hito científico, sino también un símbolo del renovado impulso global por desvelar los secretos del universo. Las agencias espaciales, en colaboración con empresas privadas, están sentando las bases para una nueva era de exploración, en la que Marte y los exoplanetas ocupan un lugar destacado en la agenda internacional.
A medida que el Perseverance continúa su exploración de las llanuras marcianas, la humanidad se acerca, paso a paso, a responder algunas de las preguntas más fundamentales sobre nuestro lugar en el cosmos. (Fuente: NASA)
