El asombroso clima de otros mundos: así son las estaciones en el Sistema Solar
En la Tierra, el paso de las estaciones marca nuestro calendario y condiciona la vida cotidiana. Cada tres meses, el planeta experimenta cambios de temperatura, luz y paisaje debido a la inclinación de su eje y a su órbita alrededor del Sol. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo son las estaciones en otros mundos del Sistema Solar? Desde los rojizos atardeceres marcianos hasta los larguísimos inviernos de Neptuno, la diversidad planetaria ofrece un fascinante abanico de condiciones climáticas que despiertan la curiosidad de científicos y entusiastas del espacio.
**Marte: estaciones parecidas, días distintos**
Marte, el planeta rojo, comparte una inclinación axial similar a la terrestre (aproximadamente 25 grados), lo que le proporciona estaciones como las nuestras. Sin embargo, su año dura 687 días terrestres, y cada estación es casi el doble de larga que en la Tierra. El verano marciano puede resultar sorprendentemente frío, con temperaturas que rara vez superan los 20 °C en el ecuador durante el día y que caen bruscamente por la noche. Los inviernos son duros y polares, acompañados de tormentas de polvo que pueden envolver el planeta entero y dejar a los rovers, como el Perseverance de la NASA, trabajando a ciegas durante semanas.
Uno de los fenómenos más espectaculares de Marte son sus atardeceres azulados, provocados por la fina atmósfera cargada de polvo, que dispersa la luz solar de manera diferente a la terrestre. En los polos, los casquetes de dióxido de carbono se expanden y contraen según la estación, modificando incluso la presión atmosférica global.
**Júpiter y Saturno: gigantes sin estaciones tradicionales**
En los gigantes gaseosos como Júpiter y Saturno, las estaciones son mucho menos marcadas. Con una inclinación axial muy pequeña (3° en el caso de Júpiter y 27° en Saturno), los cambios estacionales son mínimos, aunque ambos planetas experimentan complejas dinámicas atmosféricas. Aquí, lo que realmente destaca son los vientos huracanados y las tormentas colosales, como la Gran Mancha Roja de Júpiter, que llevan siglos rugiendo en sus atmósferas.
Saturno, sin embargo, muestra algunos cambios estacionales en sus anillos, que a lo largo de su año de 29,5 años terrestres, varían de orientación y visibilidad vistos desde la Tierra. Las sondas Cassini, de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA), han permitido estudiar estos cambios con un detalle sin precedentes.
**Urano y Neptuno: estaciones extremas y largas**
El caso de Urano es peculiar: su eje de rotación está tan inclinado (casi 98 grados) que el planeta prácticamente rueda sobre su órbita. Esto provoca que cada polo apunte al Sol durante 42 años seguidos, sometiéndose a larguísimos “días” y “noches” polares. Las consecuencias de este fenómeno sobre su clima aún se investigan, pero se cree que causan cambios extremos en la atmósfera, con vientos de hasta 900 km/h.
En Neptuno, a casi 4.500 millones de kilómetros del Sol, las estaciones duran unos 40 años terrestres cada una, debido a su lento viaje orbital. Sus inviernos son crudos, con temperaturas cercanas a los -200 °C, y su atmósfera azulada está dominada por tormentas y vientos supersónicos. La sonda Voyager 2, lanzada por la NASA en 1977, fue la única en visitar Neptuno y reveló la presencia de grandes sistemas tempestuosos activos, como la Gran Mancha Oscura.
**La exploración del clima planetario en la nueva era espacial**
Las agencias espaciales, tanto públicas como privadas, están cada vez más interesadas en entender el clima de otros mundos. NASA, ESA y Roscosmos, junto a empresas como SpaceX, Blue Origin, Virgin Galactic y la española PLD Space, impulsan misiones que buscan desentrañar los secretos atmosféricos de planetas y lunas del Sistema Solar.
En Marte, por ejemplo, los datos recogidos por los rovers de la NASA y las misiones internacionales ayudan a planificar futuras misiones tripuladas, donde conocer el clima local será crucial para la seguridad de los astronautas. Por su parte, SpaceX apunta a la colonización marciana, mientras que Virgin Galactic y Blue Origin trabajan en el turismo suborbital, acercando la experiencia del espacio a ciudadanos de a pie. PLD Space, pion

 
							 
							